Una normalidad dominada por la crisis en la que nos han metido la banca y un sistema especulativo sin escrúpulos, donde al capital todo le esta permitido, y que, después de salvar al sistema financiero, acabamos pagando los que no tenemos ninguna culpa.
Además de las medidas ya anunciadas se atisban nubarrones de reforma del mercado laboral, que parece que no busca precisamente garantizar unas condiciones dignas a los trabajadores o eliminar los contratos en precario sino que mas bien persigue abaratar el despido y otras lindeces similares, buscando favorecer al capital y a las empresas en detrimento de los trabajadores.
En Puerto Real la situación se vislumbra, al menos, complicada, mas aun tras los rumores de la paralización del segundo puente, que por nosotros no debería ni siquiera haberse diseñado, pero una vez en construcción sí nos preocupa la situación de las personas que en él trabajan, sean de donde sean. El enésimo error del modelo del hormigón y la gran infraestructura.
Volvemos a insistir en que es necesario un cambio de rumbo, que no podemos seguir esperando la insostenible resurrección del ladrillo.
Hay que avanzar hacia un nuevo modelo basado en las energías renovables, a la que se deberían enganchar nuestros Astilleros diversificando su producción.
Y por otra parte hoy comienza el final de una legislatura marcada por el pacto contra Puerto Real, el rodillo, el colapso de la economía local, el oscurantismo, las prácticas antidemocráticas con el nepotismo y la soberbia como abanderados de un gobierno municipal que ha perdido el norte, si es que alguna vez supo donde lo tenía.
Los Verdes, convencidos de que entre todos es posible, os animamos a que nos ayudeis a cambiar la triste situacion actual y devolver la vida a un pueblo que nunca merecio perderla.