Desde Los Verdes vemos del todo incongruente que el Ayuntamiento autorice una motorada en la ciudad el mismo día que se celebra el Día de la bicicleta. Primero por la filosofía del evento ciclista que implica que al menos por un día dejemos los vehículos motorizados en casa y segundo por las posibles limitaciones que podría tener el Ayuntamiento para mantener la seguridad en el municipio con la coincidencia de dos eventos de estas características.
Por otra parte seguimos echando en falta la celebración de "el Día sin coche", en lugar de el Día de la bici. No es que el acto sea malo en sí, pero queremos transmitir a la ciudadanía que no pierda el norte de lo que debe suponer la bicicleta, un verdadero medio de transporte para usar todos los días y no un juguete para dar paseitos como parece entender el Ayuntamiento.
A los moteros desaprensivos (que no son todos por supuesto) queremos que entiendan que no todo el mundo comparte el culto al ruido, la velocidad y la invasión de zonas peatonales como ha ocurrido en el paseo marítimo (con la acertada intervención de la organización, también hay que decirlo). En fin, que no paguen justos por pecadores.