En el Pleno Ordinario del pasado mes de noviembre, entre otros ruegos y preguntas, nuestro Portavoz Iván Canca puso sobre la mesa la posibilidad de que la futura urbanización del tablero superior del soterramiento se planteara bajo premisas de urbanismo sostenible y accesible.
Tras petición de nuestro grupo, el concejal de Urbanismo, Juan Carlos Martínez, nos mostró el proyecto de urbanización del tablero. En este proyecto se aprecia como la futura plaza en la que se ubicará la estación de ferrocarriles se encuentra rodeada de carretera en todo su perímetro. En esa misma reunión y posteriormente en el Pleno, nuestros concejales plantearon la posibilidad de suprimir la carretera que unirá esta futura plaza con el Porvenir, para convertir esta zona en un gran espacio peatonal para el disfrute de las personas, que conectaría el centro ciudad con la zona norte, prolongando los itinerarios peatonales desde Las Canteras hasta el centro histórico. Incluso, con estudio de movilidad de por medio, se podría estudiar la peatonalización de parte de la Calle San Francisco.
Canca manifiesta que “la idea es convertir el Porvenir y la futura plaza de la estación en una zona de recreo silenciosa y segura. De forma que no haya ningún tipo de peligro para la infancia y el resto de visitantes del espacio. Hay que reivindicar "zonas libres de coches" para los espacios verdes. Con una doble calzada junto a El Porvenir lo único que se va oír son los coches. El tráfico siempre puede desviarse a la trasera de la estación, donde se concentran los aparcamientos en el proyecto.”
Según nuestro concejal verde Enrique Vite “no es la primera idea que hemos planteado para la futura urbanización del soterramiento. En su momento nos negamos a que se cree una gran carretera de doble carril, como ya se hizo en el acceso a la ciudad junto a Entrevías, y ahora pedimos que se urbanice pensando en hacer una ciudad más amable, y no en que los coches circulen rápido dentro del casco. Tenemos que aprovechar el espacio generado para crear una ciudad moderna y habitable y no caer en el error de facilitar el acceso de los coches para cruzar la ciudad, pues eso supondría haberse gastado 55 millones de euros para acabar dividiendo de nuevo nuestro pueblo. El primer tramo de la circunvalación, ya construido por el anterior Gobierno Local, es un dislate desde el punto de vista del diseño urbano. Resulta calamitoso que se inviertan tantos millones de euros para un soterramiento que unirá la zona norte y sur de la ciudad a lo largo de unos ochocientos metros y que luego se cometa la desfachatez de diseñar una vía que vuelve a dividir al pueblo en un tramo de 400 metros.”
“Para EQUO la autovía y la autopista ya ejercen la función de vía rápida de acceso al pueblo, con hasta cuatro entradas a distintos puntos de la ciudad. Por tanto, no es necesario el uso del espacio útil que generará el soterramiento para aumentar la permeabilidad de coches dentro del casco urbano. Más bien al contrario, si se limita la velocidad de los coches dentro del núcleo urbano se fomentará el uso de otros medios de locomoción más sostenibles, y se obtendrá más espacio para el disfrute de la ciudadanía. Así se construyen las ciudades del futuro. Apelamos al Equipo de Gobierno para que tenga visión suficiente”.