08 septiembre, 2010

Responsabilidad municipal del paro en Puerto Real

Tras trece meses sin cobrar del Ayuntamiento, Tahler, la empresa concesionario del cuidado de los jardines de Puerto Real, ha roto el contrato unilateralmente y abandona dejando a los siete empleados sin trabajo, pendientes de lo que suceda con el ERE, presentado por la empresa para prescindir de ellos.

Son otros siete candidatos mas a engrosar las listas del paro, víctimas de la política sin sentido y de tierra quemada que desde hace tiempo viene practicando el Ayuntamiento de Puerto Real.

Ya es la enésima empresa que deja alguna obra a medias, cansada de que el Ayuntamiento de Puerto Real no cumpla sus obligaciones y compromisos de pago.

Ahí están las obras abandonadas, y va para largo, de la ampliación del Teatro Principal, las del punto limpio del Río San Pedro o la situación insostenible y vergonzosa que tienen que padecer los vecinos de la Plaza de los Descalzos.

El uso caprichoso y aleatorio de los fondos municipales, fruto de una política sin sentido, de parcheo y remiendo, además de hundir la economía municipal, sumida en una pozo de deudas que lastrará incluso a futuras generaciones, arrastra también hacia abajo al empleo de nuestro pueblo, contribuyendo a destruir puestos de trabajo a un ritmo mucho mas fuerte que en los municipios de nuestro alrededor.

Así lo demuestran los datos de los últimos meses facilitados por el INEM, recordamos por ejemplo que en Julio Cádiz redujo su lista de parados en 330, Chiclana en 385, Pto. de Santa Maria en 293, y el que menos San Fernando, que redujo su número de desempleados en 212, por el contrario en Puerto Real sólo fueron diez personas las que encontraron empleo. O que decir de los datos de marzo y junio en el que el paro bajó en todas las poblaciones de la Bahía excepto en Puerto Real donde se destruyeron esos meses 153 y 96 puestos de trabajo respectivamente.

Los últimos datos siguen siendo igual de desalentadores ya que nos sitúan con 5.444 desempleados, 90 personas mas que a finales de julio, lo que supone un incremento del 1,68% respecto a dicho mes.T

En manos de Barroso y Mosquera, con las arcas municipales vacías, con los posibles ingresos por servicios en manos de empresas municipales gestionadas como si fueran cortijos, con el endeudamiento al límite legal posible, con una dinámica derrochadora sin límites, sin la construcción que salve su falta de iniciativas y de ideas a la hora de generar empleo y con el humo de futuros grandilocuentes proyectos por bandera, es fácil constatar que no se nos presenta nada bien lo que resta de legislatura a los puertorrealeños, sufridores al fin y al cabo de la incompetencia de nuestros dirigentes.

Lo único positivo es que el fin se vislumbra cerca, y que está en nuestras manos. En mayo los puertorrealeños tendremos la oportunidad de cambiar el rumbo e iniciar una nueva etapa que transforme al pueblo con las miras puestas en las enormes posibilidades que nos brinda nuestro rico y enorme patrimonio humano, cultural, histórico y ambiental, bagaje más que suficiente, unido a la capacidad de esfuerzo y de trabajo de los puertorrealeños, para soñar con un pueblo lleno de vida y de trabajo en un marco de economía sostenible, y de respeto hacia nuestro entorno natural.