Es el paso previo para la enajenación de esta finca, patrimonio del pueblo, y que la coalición gobernante no duda en ofrecer como pago, junto con otra finca municipal en pleno paseo marítimo, a Fomento de Construcciones y Contratas por la deuda, mas los intereses de demora, contraída por el Ayuntamiento con esta empresa.
A este Ayuntamiento no le importa que tenga una afectación de uso público, o que forma parte del patrimonio histórico-sentimental de Puerto Real, (entre otras cosas, el "hospitalito" ha visto nacer a muchos puertorrealeños).
Una vez llegado al límite legal de endeudamiento, y apuradas las subidass de impuestos, la única salida que le queda al bipartito, Barroso-Mosquera, es la venta de patrimonio municipal, en una muestra de ineptitud e ineficacia para sacar adelante la gestión económica del Ayuntamiento.
Los Verdes propusimos, en las alegaciones al PGOU, la recuperación de esta finca y su puesta a disposición del pueblo para usos culturales, y en marzo de 2009, ya denunciamos los planes que tenía el equipo de gobierno para esta finca. Temor que ahora se va a materializar muy a nuestro pesar, viendo como poco a poco están transformando Puerto Real en un pueblo muerto y sin personalidad propia, eliminando cualquier vestigio de nuestras señas de identidad mas entrañables.