El resultado no debe gustarle ni a él mismo, dado el estado de abandono en el que se encuentra esta plaza.
Como simple botón de muestra, basta con observar que de los 12 bancos que formaban parte del equipamiento de la misma tras la enésima remodelación, sólo seis continúan en su sitio.
El último tras llevarse allí tirado todo un fin de semana, sin la más mínima actuación por parte del Ayuntamiento por volver a anclarlo en su sitio o por retirarlo.